En Prepacking somos expertos en el control de stock
Todas las empresas que tienen tiendas o almacenes y que tienen que llevar un control de stock o administrar la producción, conocen la dificultad asociada a esta gestión de almacenes y la necesidad de una correcta gestión de sus inventarios.
Preguntas como: ¿Mi stock teórico coincide con mi stock real?, ¿cuanta mercancía tengo en mis puntos de venta, depósitos y centros de distribución?, ¿cuánto comprar?, ¿cuándo comprar?, ¿cómo disponerlo en los almacenes?, ¿cómo gestionar las compras?, etc. no siempre tienen fácil contestación cuando hablamos de la gestión y control de stock.
Por ello, Prepacking pone a disposición de sus clientes toda su experiencia y conocimiento en la gestión de almacenes para conseguir los siguientes objetivos y beneficios:
Conocer y garantizar la realidad de su stock.
Obtener resultados claros y precisos alejados de conflictos de intereses.
Evidenciar la “perdida oculta”.
Cuantificar e identificar las perdidas de mercancía rota, deteriorada, caducidades, etc.
Detectar y eliminar el robo de mercancía.
Disminuir los niveles de stocks y por tanto disminuir el inmovilizado y aumentar la liquidez.
Aumentar la flexibilidad y disminuir la incertidumbre en la toma de decisiones.
Tratar de forma homogénea todos sus establecimientos.
Que decisión tomar respecto a la producción o políticas de liquidación.
Reducir la cantidad de productos defectuosos en caso de productos perecederos u obsoletos.
Conseguir una producción más flexible.
Disminuir los costes asociados a la gestión de almacenes.
Disminuir el espacio físico de los almacenes.
Imparcialidad en los resultados.
Confidencialidad.
Disponibilidad de un servicio flexible 24 horas 365 días adaptando nuestros sistemas y métodos a sus necesidades o de su auditor con rigurosidad y profesionalidad.
Antes de comenzar el proyecto, los técnicos de Prepacking y del cliente se reúnen para definir los canales de comunicación y los parámetros de actuación con medidas estratégicas concretas para, con una total discreción, llevar a cabo su labor en días, fechas y horas que el cliente estime más idóneas.